Me encantan los fines de semana porque estamos papá, mamá y yo juntos todo el día. Por eso me gusta levantarme temprano, ¡así aprovechamos al máximo! Pero creo que a papá y a mamá no les hace mucha gracia que les despierte a las 6:30h-7:00h, así que yo intento animarles y ellos siempre me dicen «¿cómo puedes estar tan despierto a las 7:00h de la mañana?». Ellos con la legaña puesta, casi sin poder abrir los ojos, y yo… maaaaaarchaaaaaaaa:
Me troncho yo solo. Qué caretos tienen papá y mamá a las 7! Además, son un poco raros, porque yo aguanto gracias a la siesta que me echo después del desayuno, parece que no aprendan de verme!
😉