Sí, chicos y chicas, el pasado miércoles cumplí… ¡11 semanas! Y dicen papá y mamá que estoy creciendo mucho… ¡pues claro! Mirad lo guapo que estoy ya (bueno, como siempre desde que nací jejeje :D).
Esta semana empezó conociendo a una chica algo mayor que yo, llamada Gemma, hija de unos amigos de mamá. Gemma y yo estuvimos charlando un rato y nos pusimos de acuerdo para llorar y gritar «¡quiero comeeeeer!» al mismo tiempo. Fue divertido ver a las mamás prepararnos la comida a la vez, jejejejeeje. Por la tarde, vinieron a verme la tita Puri y los tíos de papá a casa un ratito. Hacía mucho que no me veían y claro, ¡me vieron muy cambiado! Pero es que cambio semana a semana (por esto escribo estos posts)… Por la noche, me quedé a solas con papá y es que mamá tenía una cena con sus compañeros de trabajo. Me gustó mucho tener «una noche de machotes», como la llamó papá (y no le dejé dormir mucho, para poderla disfrutar los dos juntos), pero sé que él también echó de menos a mamá, porque cuando ella llegó por fin nos dormimos tranquilamente los dos 🙂
El fin de semana fue tranquilito. El sábado hacía mucho frío y llovía, pero fuimos a un sitio llamado Correos donde te dan regalos (¿qué guay, no?)… ¡y es que la tita Pauline de San Paco había enviado unos bodies mekkies o frekkies o trekkies o algo así! No sé, todavía no me entero muy bien, pero sé que a papá le hizo mucha ilusión y no dejaba de repetirme «live long and prosper», jejejejejee. Después de recoger ese paquete, fuimos a un restaurante italiano llamado CasaVostra. Yo tomé mi bibi de siempre y fue muy gracioso porque mientras papá me daba a mí de comer, mamá le daba de comer a papá! Vale, no era un bibi, pero pinchaba cosas con un tenedor y se las acercaba a la boca a papá (que estaba liado dándome de comer a mí, claro). ¡Fue divetido! Por la tarde, estuvimos jugando por casa y estuve haciendo muchos esfuerzos por mantener mi cabeza y mi cuello erguidos yo solito… ¡me cansé mucho, pero ya aguanto un montón de rato con el cuello recto sin que me tengan que sujetar la cabeza! ¿Estoy hecho un machote o qué? 🙂
Y poco más. Nos hemos dedicado a pasear por el río, ir a comprar alguna cosilla y ya… Ah, y el martes llegaron los avis desde Igualada y así hemos estado con ellos estos días, riéndome con la iaia y el avi, que me hacen y dicen muchas tonterías, ¡y me encanta! 😀
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