Tanto papá como mamá tienen el pelo corto (bueno, papá tiene poco pelo, así en general jejeje), así que es difícil agarrarles el pelo y tirar con fuerza (aunque yo lo intento, eh! :D). En los papás es normal, pero en las mamás no tanto y aunque me gustaría que mamá tuviera el pelo largo para poder tirar de él, lo cierto es que está muy guapa también con el pelo corto, jijijiji.
Así que el otro día, cuando vino la tita Puri… ¡aproveché!
¿Lo más guay de todo? Ella parecía encantada, jajajajaja.
😉
¡Vivan las titas guapas!.
Dice papá que se llevó toda la belleza familiar (menos mal que a mí sí me ha tocado :D)