¡y seguimos con el viaje a Japón, que estamos ya en el día 7!
Nos levantamos, cogimos un tren y después otro (¡sin conductor!) hasta Odaiba donde hacía un vieeeeeento y un fríiiiiiioooooo:
Allí hice un amigo, el Sr. Guau de la Fuji TV, que era muy grande y divertido y le vi en muchos sitios.
Y me lo pasé genial en uno de los escenarios de un programa para niños… ¡no quería salir de allí!
Me hice más fotos con El Guau:
Y me quedé un recuerdo suyo:
Comí espaguetis con tomate:
Y un plátano, como casi todos los días, ^^:
Y aunque yo ya había comido, le robé patatas fritas a papá:
Saqué la lengua en la autofoto que nos hicimos los tres:
Y me quedé frito. Se supone que vimos un Gundam enorme, una exposición de Toyota, una noria… ¡y no vi nada! Snif, snif, me quedé taaaaaan dormido que ni me enteré. Me desperté para merendar, casi, jijijiji. Nos sentamos en un parque, mirando al mar:
Jugamos… (¿veis el señor Guau de peluche? Fue entrar en una tienda de la Fuji TV y se me fueron los ojos!!!)
Y merendé un poco:
Y desde allí fuimos andando por ese paseo cercano al mar:
Hasta que nos encontramos con un barco pirata que era un parque para niños y tenía un tobogán súper chulos, jijijiji:
Me tiré varias veces por el tobogán, fue chulo… pero teníamos que seguir paseando, así que dejamos el parque atrás y fuimos por otra calle:
Y cuando llegamos cerca del puente… me enfadé. Estaba cansado. No quería estar en el cochecito pero tampoco quería andar más y papá y mamá no querían llevarme a hombros (creo que ellos también estaban cansados) así que me tiré al suelo y me puse a llorar… 😀
Al final me calmé y volvimos en ese tren sin conductor hasta el centro de Tokio:
Y allí vimos un montón de luces de Navidad súper chulas:
Luego cogimos otro tren hasta un sitio llamado Ebisu. Papá y mamá se estuvieron riendo haciéndose una autofoto (no sé muy bien por qué), dimos una vuelta y nos volvimos al hotel, donde cenamos en un restaurante situado en una planta altíiiiiisima:
… ¡continuará!
😀
Información Bitacoras.com…
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